Dicen que el dinero no da la felicidad, pero a la vista de la historia que cuentas, el bibliotecario no debe conocer el refrán, pero como dice el Dieu, por la cara de enfadado que tiene el monigote y la de la prota (que por cierto, ¿tiene nombre?, tan sorprendida ella, sí deben estar al tanto.<br />
En fin, así es la vida y asi se tiene que contar.
E
Ester
14/12/2008 18:02
no te preocupes! por ahora, seguro, uno por dia :)
D
diego
14/12/2008 14:31
El cambio de expresión del monigote publicitario debe de ser fiel reflejo de lo que barruntas tras la sonrisa que esbozas por cortesía...<br />
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Me estoy haciendo un adicto a tus cosillas de lo cotidiano.<br />
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En serio: insisto en lo que apuntaba tu copine; lo de pensar en una recopilación después de que cierres el ciclo vital Oslense. Enhorabuena!!!